Cuentos de Amistad

El Misterio de la Escuela Risueña

Lectura para 11 años

Tiempo de lectura: 7 minutos

Español

Puntuación:

5
(1)
 

Compartir en WhatsApp Compartir en Telegram Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir por correo electrónico
5
(1)

En la tranquila ciudad de Alegría, había una escuela muy peculiar, conocida como «La Escuela Risueña». Esta no era una escuela común, pues en sus pasillos resonaban constantemente las carcajadas y bromas de sus estudiantes. Entre ellos, tres amigas inseparables: Valeria, Alondra y Morelia.

Valeria era la más alegre del grupo, siempre con una sonrisa dibujada en su rostro y una broma lista en sus labios. Alondra, la más reflexiva y tranquila, era conocida por su increíble inteligencia y amor por los libros. Morelia, por su parte, era la más aventurera, siempre lista para explorar cada rincón de la escuela.

Un día, mientras las tres amigas conversaban en el patio, notaron algo extraño. Los profesores parecían preocupados, y se susurraban entre ellos con miradas serias. Esto captó la atención de las tres niñas, quienes decidieron investigar.

Esa misma noche, Valeria propuso un plan audaz: explorar la escuela después del horario de clases para descubrir qué estaba sucediendo. Alondra, aunque algo reticente, aceptó, motivada por la curiosidad. Morelia, emocionada por la aventura, fue la primera en decir «¡Sí!».

Las chicas se encontraron esa noche en la escuela. Se deslizaban silenciosamente por los pasillos oscuros, alumbrados solo por sus linternas. En su camino, se encontraron con situaciones cómicas, como tropezar con escobas y asustarse con su propia sombra, lo que les arrancaba risas contenidas.

Pero pronto, el ambiente se tornó más misterioso. Encontraron una puerta oculta detrás de un armario en la biblioteca. Al abrirla, revelaron una escalera que descendía a un sótano secreto. Con cautela, bajaron las escaleras, encontrándose con un viejo aula llena de objetos antiguos y polvorientos.

Entre susurros y risas nerviosas, exploraron el lugar. Encontraron un diario antiguo, lleno de anotaciones sobre secretos de la escuela. Fascinadas, se sentaron a leerlo. Según el diario, la Escuela Risueña había sido construida sobre un antiguo teatro, donde se decía que un tesoro estaba escondido.

Decididas a encontrar ese tesoro, las chicas planearon una búsqueda meticulosa del sótano. Durante días, después de clases, se dedicaron a explorar cada rincón, enfrentándose a diversos desafíos y resolviendo acertijos que las acercaban cada vez más al tesoro.

Finalmente, un día, tras resolver un enigma particularmente difícil, una pared del sótano se abrió, revelando una pequeña habitación iluminada por una luz dorada. Dentro, encontraron el tesoro: una caja llena de antiguas monedas de oro y joyas. Pero lo más valioso para ellas no era el tesoro material, sino la amistad y las aventuras vividas juntas.

Decidieron informar a los profesores sobre su hallazgo. La escuela decidió usar el tesoro para mejorar las instalaciones y crear un nuevo espacio para que los estudiantes desarrollen su creatividad y amistad.

Después de su increíble descubrimiento, Valeria, Alondra y Morelia se convirtieron en heroínas locales. La noticia del tesoro descubierto en la Escuela Risueña se esparció rápidamente por la ciudad de Alegría, atrayendo la atención de personas de todas partes.

Sin embargo, con la fama también llegaron nuevos desafíos. La escuela comenzó a recibir visitantes curiosos y periodistas, lo que alteró la tranquila vida escolar a la que estaban acostumbradas las niñas. Además, algunas personas codiciosas intentaron reclamar el tesoro para sí mismas, lo que llevó a las chicas a enfrentar situaciones complicadas.

Valeria, Alondra y Morelia, con la ayuda de sus profesores y padres, aprendieron a manejar estas situaciones difíciles. Organizaron visitas guiadas a la escuela, compartiendo la historia del tesoro y su aventura con otros estudiantes y visitantes. Esto ayudó a que todos comprendieran la importancia del hallazgo y su valor histórico, más allá del material.

En medio de esta nueva rutina, las chicas no perdieron su esencia. Continuaron con sus travesuras y risas, manteniendo viva la atmósfera alegre de la Escuela Risueña. Además, comenzaron a planear nuevas aventuras, siempre buscando descubrir los misterios que aún podían esconderse en los rincones de su querida escuela.

Un día, mientras exploraban el ático de la escuela, descubrieron un viejo mapa que parecía indicar otro secreto oculto en la ciudad de Alegría. Sin perder tiempo, planearon una nueva aventura, esta vez fuera de los límites de la escuela.

En esta nueva aventura, enfrentaron desafíos aún mayores. Navegaron por las calles de la ciudad, resolviendo acertijos y siguiendo pistas que las llevaban a lugares que nunca habían visitado. Con cada paso, su amistad se fortalecía, y su valentía y astucia se hacían más evidentes.

Finalmente, el mapa las llevó a un antiguo parque en el corazón de la ciudad, donde descubrieron una cápsula del tiempo enterrada hace muchos años por los fundadores de Alegría. Dentro, encontraron objetos y cartas que contaban historias del pasado de la ciudad, llenas de enseñanzas y sabiduría.

Valeria, Alondra y Morelia decidieron compartir este nuevo hallazgo con toda la ciudad, organizando una exposición en la escuela. La cápsula del tiempo se convirtió en un símbolo de la historia y la comunidad de Alegría, uniendo a la gente en un sentido de pertenencia y orgullo.

Conclusión:

Las aventuras de Valeria, Alondra y Morelia no solo revelaron tesoros y secretos, sino que también fortalecieron los lazos de su amistad y su conexión con la comunidad. Aprendieron que la curiosidad, el coraje y la amistad pueden llevar a descubrimientos maravillosos y unir a las personas de maneras inesperadas. Y así, la Escuela Risueña se convirtió en un lugar no solo de aprendizaje, sino también de magia, aventura y amistad inquebrantable.

image_pdfDescargar Cuentoimage_printImprimir Cuento

¿Te ha gustado?

¡Haz clic para puntuarlo!

Comparte tu historia personalizada con tu familia o amigos

Compartir en WhatsApp Compartir en Telegram Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir por correo electrónico

Cuentos cortos que te pueden gustar

autor crea cuentos e1697060767625
logo creacuento negro

Soy Francisco J., apasionado de las historias y, lo más importante, padre de un pequeño. Durante el emocionante viaje de enseñar a mi hijo a leer, descubrí un pequeño secreto: cuando las historias incluyen a amigos, familiares o lugares conocidos, la magia realmente sucede. La conexión emocional con el cuento motiva a los niños a sumergirse más profundamente en las palabras y a descubrir el maravilloso mundo de la lectura. Saber más de mí.

Deja un comentario