El 12 de agosto de 2024 fue un día que marcaría el comienzo de una historia llena de amor y aventuras. Xime y Ana Pau se conocieron ese día, de una manera tan natural y mágica que parecía que todo había sido diseñado por el destino. Desde el primer momento en que se miraron, ambas supieron que algo especial iba a nacer entre ellas, aunque no sabían exactamente qué.
Xime era una chica con una risa contagiosa y un corazón lleno de bondad. Su forma de ser, su manera de escuchar a los demás, y su actitud siempre positiva, la hacían brillar en cualquier lugar. Ana Pau, por su parte, era una persona reservada al principio, pero con una gran capacidad para amar y cuidar a los demás. Aunque al principio no lo mostraba, Ana Pau tenía una fortaleza interna que la hacía única.
Las primeras salidas de Xime y Ana Pau fueron siempre divertidas y emocionantes. Fueron caminatas por el parque, charlas interminables sobre cualquier cosa, y risas que llenaban el aire. Durante esas salidas, Ana Pau comenzó a descubrir la verdadera personalidad de Xime: su capacidad para hacerla sentir segura, su manera de protegerla sin ser invasiva, y la forma en que la cuidaba con todo su ser. Xime la entendía sin necesidad de palabras, y eso la hacía sentir algo único.
Con cada encuentro, el amor fue creciendo entre ellas. El 16º encuentro fue el más especial. Ana Pau sentía que ya no podía seguir ocultando lo que sentía por Xime. Su corazón latía más rápido cada vez que la veía, y sabía que lo que sentía no era algo pasajero, sino algo profundo y verdadero.
Esa tarde, mientras caminaban por un sendero rodeado de árboles, Ana Pau decidió que era el momento de hablar. Se detuvo frente a Xime, tomó su mano y la miró a los ojos.
—Xime —dijo Ana Pau con una voz suave, pero llena de determinación—, quiero que sepas algo muy importante. Desde que nos conocimos, mi vida ha cambiado de una manera increíble. He aprendido lo que significa ser cuidada, escuchada y respetada, y todo eso lo he aprendido gracias a ti. Eres una gran persona, con un corazón hermoso, y cada vez que estoy contigo, siento que el mundo es un lugar mejor.
Xime, sorprendida por las palabras de Ana Pau, la miró fijamente, sin saber qué decir. Ana Pau continuó.
—Te amo por lo que eres, por tu manera de amar, por tu manera de escucharme siempre, por la manera en que me haces sentir segura. Y quiero preguntarte algo, con todo mi corazón… ¿Quieres ser mi novia? Quiero seguir construyendo aventuras a tu lado, compartir risas, momentos de complicidad, y enfrentar lo que venga juntos. Te prometo que siempre voy a apoyarte, cuidarte, protegerte y amarte de la mejor manera que pueda. Quiero que siempre, siempre, siempre, sepas que conmigo siempre serás feliz.
Xime no podía creer lo que estaba escuchando. Su corazón latía con fuerza, y una sonrisa comenzó a aparecer en su rostro. Había esperado tanto por ese momento, pero nunca imaginó que sería tan perfecto.
—Ana Pau, siempre he soñado con tener una persona como tú a mi lado —respondió Xime, con los ojos llenos de emoción—. Claro que quiero ser tu novia. Y siempre, siempre, siempre te prometo que estaré ahí para ti, para que sigamos creciendo, amándonos y compartiendo todo lo bueno que la vida nos tenga preparado.
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Autor del Cuento
Soy Francisco J., apasionado de las historias y, lo más importante, padre de un pequeño. Durante el emocionante viaje de enseñar a mi hijo a leer, descubrí un pequeño secreto: cuando las historias incluyen a amigos, familiares o lugares conocidos, la magia realmente sucede. La conexión emocional con el cuento motiva a los niños a sumergirse más profundamente en las palabras y a descubrir el maravilloso mundo de la lectura. Saber más de mí.