Cuentos de Valores

El Mundo de Nunca Jamás: La Aventura de Lila, David y Eliot

Lectura para 4 años

Tiempo de lectura: 2 minutos

Español

Puntuación:

0
(0)
 

Compartir en WhatsApp Compartir en Telegram Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir por correo electrónico
0
(0)

En un rincón escondido del universo, donde los días eran eternamente soleados y las noches llenas de estrellas que bailaban, existía un lugar mágico llamado Nunca Jamás. Este lugar era un paraíso de imaginación donde los sueños más locos de los niños cobraban vida. Los habitantes de Nunca Jamás eran seres maravillosos, desde hadas luminosas hasta animales que hablaban y árboles que cantaban melodías alegres.

En este maravilloso mundo vivían tres amigos inseparables: Lila, una niña con largos cabellos morados y ojos brillantes como esmeraldas; David, un niño de sonrisa traviesa y espíritu valiente, con cabello castaño y ojos color cielo; y Eliot, una criatura pequeña y adorable, mitad ardilla y mitad conejo, con un pelaje amarillo brillante y ojos grandes y redondos. Los tres compartían un vínculo especial, explorando juntos cada rincón de Nunca Jamás y viviendo aventuras sin fin.

Una mañana, mientras el sol se levantaba perezosamente sobre el horizonte, Lila, David y Eliot se encontraban reunidos en su lugar favorito, un claro en el bosque encantado, rodeado de árboles que susurraban historias antiguas y flores que cambiaban de color con cada rayo de sol. Lila propuso una nueva aventura: buscar el legendario Árbol de los Deseos, un árbol mágico que, según la leyenda, podía conceder un deseo a quien lo encontrara.

Emocionados por la idea, los tres amigos se pusieron en marcha. El camino estaba lleno de obstáculos, pero también de maravillas. Cruzaron ríos de agua cristalina, escalaron montañas que tocaban el cielo y pasaron por praderas llenas de flores cantoras. Cada paso que daban los acercaba más a su objetivo, pero también los unía más como amigos.

Un día, mientras cruzaban un puente de madera sobre un profundo barranco, Eliot, siempre curioso y juguetón, se desvió del camino para perseguir una mariposa de colores brillantes. En un trágico accidente, el puente se rompió bajo sus patas, y Eliot cayó al abismo. Lila y David, horrorizados, corrieron hacia el borde, pero no había nada que pudieran hacer. Eliot había desaparecido.

El dolor de perder a su amigo fue inmenso. Lila y David se abrazaron, llorando juntos en silencio, sintiendo un vacío en sus corazones que nunca antes habían conocido. Decidieron seguir adelante con la búsqueda del Árbol de los Deseos, con la esperanza de que su deseo podría traer a Eliot de vuelta.

La travesía continuó, pero ya no era la misma. La alegría y la risa que antes llenaban sus días ahora estaban teñidas de tristeza y añoranza. Sin embargo, en su dolor, Lila y David encontraron una fuerza nueva. Se apoyaron mutuamente, recordando las enseñanzas y el espíritu alegre de Eliot. Aprendieron a valorar cada momento juntos, a apreciar la belleza de Nunca Jamás de una manera más profunda y a encontrar consuelo en los recuerdos de su querido amigo.

Finalmente, después de muchas semanas de búsqueda, Lila y David llegaron al Árbol de los Deseos. Era un árbol gigantesco, con hojas doradas que brillaban bajo la luz del sol y ramas que parecían alcanzar las estrellas. Se arrodillaron ante el árbol y cerraron los ojos, deseando con todo su corazón que Eliot regresara. Pero, en ese momento de reflexión, comprendieron algo importante.

Lila abrió los ojos y miró a David. «No podemos traer a Eliot de vuelta», dijo con voz suave pero firme. «Pero podemos honrar su memoria y vivir nuestras vidas con la misma alegría y curiosidad que él tenía.»

David asintió, sintiendo una paz interior que no había sentido desde la pérdida de Eliot. «Eliot siempre estará con nosotros, en nuestros corazones y en nuestros recuerdos. Viviremos nuestras vidas de una manera que lo haga sentir orgulloso.»

Comparte tu historia personalizada con tu familia o amigos

Compartir en WhatsApp Compartir en Telegram Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir por correo electrónico

Cuentos cortos que te pueden gustar

autor crea cuentos e1697060767625
logo creacuento negro

Soy Francisco J., apasionado de las historias y, lo más importante, padre de un pequeño. Durante el emocionante viaje de enseñar a mi hijo a leer, descubrí un pequeño secreto: cuando las historias incluyen a amigos, familiares o lugares conocidos, la magia realmente sucede. La conexión emocional con el cuento motiva a los niños a sumergirse más profundamente en las palabras y a descubrir el maravilloso mundo de la lectura. Saber más de mí.

Deja un comentario