Cuentos de Terror

La Voz que Nunca Calla

Lectura para 11 años

Tiempo de lectura: 2 minutos

Español

Puntuación:

0
(0)
 

Compartir en WhatsApp Compartir en Telegram Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir por correo electrónico
0
(0)

Era una noche fría, y Juan estaba sentado en su cama, mirando la ventana como si esperara encontrar una respuesta en la oscuridad del cielo. El silencio en su habitación era profundo, roto solo por el sonido de su respiración. Las sombras en las paredes parecían moverse con vida propia, pero Juan ya no les prestaba atención. Se había acostumbrado a la soledad, al vacío, y a esa sensación constante de no pertenecer a ningún lado.

Durante los últimos meses, todo en su vida había comenzado a perder sentido. Las cosas que antes disfrutaba ahora le parecían pesadas, como si estuviera atrapado en una rutina interminable. Se sentía cansado, agotado de luchar contra la tristeza que lo envolvía como una niebla densa. Las palabras de consuelo de sus amigos y familiares rebotaban en él sin dejar huella, como si estuviera encerrado en una burbuja que nadie podía atravesar.

«¿Qué sentido tiene seguir así?» pensaba Juan, sin poder encontrar una respuesta que lo convenciera. Su mente era un torbellino de pensamientos oscuros, y cada día que pasaba, la idea de rendirse se hacía más fuerte. A veces deseaba desaparecer, que todo ese peso se evaporara de su vida. Sentía que nadie podía entenderlo, y aunque lo intentaba, ya no quería cargar con esa tristeza abrumadora.

Esa noche, mientras el reloj marcaba las 2:00 AM, algo cambió. En medio de sus pensamientos oscuros, escuchó algo. Era un susurro, suave, pero lo suficientemente claro como para sacarlo de su ensimismamiento.

«Juan…» dijo la voz, como un eco en su cabeza.

Se incorporó en la cama, mirando a su alrededor, pero no había nadie en la habitación. El susurro continuó, esta vez más claro.

«Juan… no estás solo», repetía la voz, envolviéndolo con una calma extraña.

Por un momento, Juan pensó que se estaba volviendo loco. ¿Cómo podía haber escuchado una voz si estaba solo? Pero no era una voz externa. Venía de su mente, desde lo más profundo, de un rincón que nunca había notado. Una parte de él que, hasta ese momento, había estado dormida.

«¿Quién eres?» preguntó en voz alta, sin esperar una respuesta. Pero la voz contestó.

«Soy la parte de ti que ha estado esperando. La parte que nunca se ha rendido», respondió la voz con suavidad. «Estoy aquí para recordarte que hay algo más allá de la oscuridad.»

Juan no supo qué decir. Durante meses había sentido que no tenía a nadie, que estaba completamente solo en su batalla contra la depresión. Pero ahora, esa voz… aunque extraña, le traía una sensación de calma, como si una pequeña luz se encendiera en el túnel en el que había estado perdido.

«¿Por qué debería seguir?» preguntó Juan, su voz temblorosa. «Todo parece tan vacío…»

La voz se mantuvo en silencio por un momento, como si reflexionara sobre su respuesta. Luego, con una calidez que Juan no había sentido en mucho tiempo, le dijo: «Porque dentro de ti aún hay algo que quiere luchar. Cada día que te levantas, es una pequeña victoria, aunque no lo veas. La oscuridad siempre parece interminable, pero incluso en la noche más larga, el sol siempre vuelve a salir.»

Las palabras resonaron en la mente de Juan. Había estado tan centrado en su dolor, en su tristeza, que había olvidado que aún estaba aquí. Que, a pesar de todo, seguía vivo.

«Pero… no sé si soy lo suficientemente fuerte», murmuró.

Comparte tu historia personalizada con tu familia o amigos

Compartir en WhatsApp Compartir en Telegram Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir por correo electrónico

Cuentos cortos que te pueden gustar

autor crea cuentos e1697060767625
logo creacuento negro

Soy Francisco J., apasionado de las historias y, lo más importante, padre de un pequeño. Durante el emocionante viaje de enseñar a mi hijo a leer, descubrí un pequeño secreto: cuando las historias incluyen a amigos, familiares o lugares conocidos, la magia realmente sucede. La conexión emocional con el cuento motiva a los niños a sumergirse más profundamente en las palabras y a descubrir el maravilloso mundo de la lectura. Saber más de mí.

Deja un comentario